Confirmada la condena por delito de acusación y denuncia falsa en el ámbito militar
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El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de un Sargento Primero de la Guardia Civil por un delito de acusación y denuncia falsa, tras presentar una denuncia sin fundamento contra un superior. La resolución rechaza todos los motivos del recurso de casación interpuesto por el condenado, consolidando la calificación penal de los hechos.
Denuncia infundada a un superior jerárquico
El procedimiento se inició a raíz de una denuncia presentada por el Sargento contra un oficial de rango superior, en la que le atribuía conductas que no se pudieron probar. Tras el análisis de la prueba, el Juzgado Togado Militar Territorial concluyó que la acusación era falsa y que el denunciante había actuado con conocimiento de la falsedad o con desprecio temerario hacia la verdad, elementos que configuran el delito de acusación y denuncia falsa regulado en el artículo 456.1 del Código Penal.
La sentencia de instancia impuso una pena de multa y el abono de una indemnización en concepto de responsabilidad civil.
Recurso ante el Tribunal Supremo
El condenado presentó un recurso extraordinario por interés casacional, alegando la vulneración de:
- El principio acusatorio y el derecho a un proceso con todas las garantías (artículo 24 CE).
- El derecho a la presunción de inocencia (artículo 24.2 CE).
La Fiscalía se opuso a dicho recurso y solicitó su desestimación íntegra.
El principio acusatorio no se quebrantó
El recurrente defendía que la sentencia introdujo hechos no contenidos en el escrito de acusación, lo cual vulneraría el principio acusatorio.
Sin embargo, el Tribunal Supremo reafirmó su doctrina:
El tribunal debe ceñirse al marco fáctico de la acusación. La sentencia puede desarrollar o precisar los hechos, siempre que no altere su esencia ni introduzca elementos nuevos de forma sustancial.
Conclusión
La Sala consideró que la sentencia se mantuvo dentro de los límites del relato acusatorio. No se produjo ninguna variación sustancial ni jurídica que pudiera afectar a la calificación del delito de acusación y denuncia falsa.
No hubo indefensión ni vulneración del derecho a ser juzgado conforme a una acusación válida.
Prueba suficiente para justificar la condena
El segundo motivo alegaba la falta de pruebas suficientes, al haberse basado la denuncia en una conversación privada sin testigos. El recurrente solicitaba que se aplicara el principio in dubio pro reo.
El Supremo recuerda que, en el recurso de casación, no corresponde revisar la prueba, sino examinar si:
- La condena se basó en pruebas obtenidas legalmente.
- La valoración de las mismas fue racional, lógica y motivada.
En este caso, el tribunal de instancia fundamentó su convicción en:
- Declaraciones de varios mandos y compañeros que confirmaban un patrón de conducta repetido del acusado.
- Contraste entre las versiones exculpatorias y los testimonios incriminatorios.
- Valoración conjunta de los indicios que confirmaban el carácter doloso de la denuncia.
Conclusión
La Sala entendió que la prueba de cargo fue válida, suficiente y razonablemente valorada. No se acreditó ninguna infracción del derecho a la presunción de inocencia.
La condena por delito de acusación y denuncia falsa queda plenamente justificada.
Fallo del Tribunal Supremo
El Tribunal Supremo desestimó íntegramente el recurso interpuesto por el Sargento Primero de la Guardia Civil y confirmó la sentencia condenatoria por delito de acusación y denuncia falsa.
Las costas del proceso se declararon de oficio, conforme a lo establecido en la jurisdicción militar.